¡Ya estamos en verano! Esa época tan deseada por muchos de nosotros para poder disfrutar con amigos o familia, en la montaña o en la playa. Para hacer todo eso que no podemos hacer cuando trabajamos, de poder disfrutar de los deportes acuáticos, buceo, paddle surf, natación, windsurf, esquí acuático, rafting, etc. ¿Pero qué pasa si soy usuario de lentillas?   

 

Las lentes de contacto tiene múltiples beneficios:

  • Comodidad para hacer deporte
  • Campo visual más amplio, no nos limita la montura ni la lente oftálmica
  • Mejora la calidad visual en graduaciones elevadas
  • Mejora de la estética, para aquellos usuarios que no les gusta llevar gafas
  • Puedes usar cualquier gafa de sol
  • Imagen retiniana más real
  • Libertad de movimiento

 

Pero a pesar de todos ello, tenemos que entender, que tal y como indica su nombre “lentes de contacto”, están en contacto directo con nuestros ojos. Por lo tanto tenemos que ser muy rigurosos en el cuidado y limpieza de nuestras lentillas, así como acudir a las revisiones que nos marque nuestro óptico-optometrista.

 

Además, en verano tenemos que tener especial cuidado si vamos a practicar deportes acuáticos. Las lentes de contacto blandas son porosas, es decir, tienen micros aperturas. Son como una red y permiten el paso de la lágrima y por lo tanto del oxígeno, del exterior hacia el interior de la lentilla y de ahí, el oxígeno puede llegar al ojo.

 

Pero al igual que puede pasar la lágrima, también podría pasar cualquier microorganismo que se encuentre en un medio acuático y provocarnos una infección como por ejemplo:

 

  • Queratitis por acanthamoeba (protozoo)
  • Conjuntivitis por el cloro de la piscina
  • Conjuntivitis bacteriana por clamydias (Chlamydia Trachomatis)
  • Conjuntivitis vírica por adenovirus o virus del herpes

 

Esto no significa que no se pueda usar lentillas en verano, simplemente que hemos de extremar el cuidado, por ejemplo:

 

  • Usar gafas acuáticas. Las podemos encontrar en las propias ópticas o tiendas de deporte. Estas gafas han de permitir que el ojo quede totalmente hermético y no pueda entrar agua. 
  • Usar lentillas diarias. Aunque seas usuario de lentillas mensuales, te recomendamos que los tres meses de verano utilices lentillas de reemplazo diario. De esta manera nos aseguramos que si en algún momento esa lentilla ha podido estar en contacto directo con el agua, no la vas a utilizar al día siguiente. Además, no tendrás que llevarte tus soluciones de mantenimiento contigo en las vacaciones. En el momento que las retires del ojo ya la podrás desechar a la basura. Ideal para las épocas estivales. 
  • Gafas de sol. Las gafas de sol, además de protegerte del exceso de UV que recibimos en época de verano, te pueden proteger del viento, de la arena de la playa y de pequeñas partículas que puedan alcanzar tus ojos. Las gafas de sol siempre han de ser adquiridas en ópticas para asegurarnos que cumplan los requisitos de la Comunidad Europea, fijate que lleva el marcado CE en la varilla de la gafa. Por otra parte, podrás utilizar las gafas de sol que más te gusten porque no te limitará tu graduación!
  • Lentillas con filtros UV. Existe un amplio número de marcas de lentes de contacto que también disponen de filtros UV para que sigas estando protegido cuando no puedas utilizar las gafas de sol.  

 

Ven a vernos y te daremos la mejor opción para tus necesidades para que puedas disfrutar del verano con total seguridad.