Es común entre la población no distinguir las figuras, y por lo tanto sus competencias, del óptico-optometrista y el oftalmólogo. Así que si no lo tienes claro, ¡no te preocupes! En este blog intentaremos definir la figura de cada uno.
El óptico-optometrista es el profesional de la visión que va cuidar y optimizar tu sistema visual. El asesoramiento siempre será personalizado teniendo en cuenta tus necesidades y los posibles defectos visuales que se detecten en la consulta.
- Revisa el estado de tu visión y prescribe la graduación.
- Adapta gafas, selecciona la mejor montura y lente oftálmica para tus necesidades
- Adapta lentes de contacto y te asesora en la mejor opción para tí
- Rendimiento escolar: trata problemas de lectura, dificultades de aprendizajes, lateralidad, dislexia, estrabismo, ambliopía (ojo vago), etc.
- Rehabilitación visual: desarrollo y mejora de las habilidades visuales. Por ejemplo para deportistas, pacientes con baja visión.
- Gafas de sol: asesoramiento según sus materiales, filtros, tonalidades, tipo de protección y tus necesidades.
- Sequedad ocular: examina la superficie ocular para mejorar la calidad y/o cantidad de lágrima a través de recomendaciones, lágrimas artificiales, limpiezas palpebrales.
- Control de la miopía: recomendaciones y tratamientos para evitar que el crecimiento del globo ocular (Longitud Axial) y la miopía sean muy elevados.
- Prevención de enfermedades oculares: consejos visuales para prevenir futuros problemas. Examinar las estructuras del globo ocular incluyendo su retina (fondo de ojo) para que en el caso de detectar alguna anomalía poder derivar al oftalmólogo.
El oftalmólogo estudia medicina, por lo tanto, será la persona indicada que detecte, diagnostique y trate los problemas y enfermedades oculares.
- Operaciones de cataratas, cirugía refractiva, traumatismos, trasplantes de córnea, etc.
- Prescripción de medicamentos para el tratamiento de enfermedades como podría ser la conjuntivitis, glaucoma, etc.
- Tratamientos para las enfermedades, como podría ser la DMAE.
Así que podríamos resumir que el ÓPTICO-OPTOMETRISTA es quien se encarga del correcto funcionamiento del sistema visual, mientras que el OFTALMÓLOGO es quien se encarga de detectar y tratar enfermedades.
Ambas figuras trabajan conjuntamente para garantizar un buen funcionamiento tanto estructural como visual de los pacientes. Por ejemplo, un paciente podría no ver bien por motivos diferentes, uno podría ser por tener un defecto refractivo y otro por tener alguna enfermedad que afectara alguna estructura ocular y por lo tanto no permitiese una buena visión.
Esperamos haberte resumido las competencias de cada una de las profesiones, pero si necesitas tener más información no dudes en llamarnos o venir a visitarnos, ¡estaremos encantadas de verte!